Los alcaparrones son los frutos maduros del alcaparro, un arbusto originario de Asia, aunque muy extendido y consumido en la cuenca mediterránea, especialmente en Italia y España. A diferencia de las alcaparras, que son los capullos florales sin abrir de la misma planta, los alcaparrones son más grandes, de forma alargada y contienen pequeñas semillas en su interior.
Se recolectan en primavera y, al igual que las alcaparras, se suelen encurtir en una mezcla de agua, vinagre y sal para su conservación. Tienen un sabor agridulce muy característico y una textura carnosa y jugosa.